Se denomina reciclado industrial al proceso que transforma los desechos industriales en insumos para crear nuevos productos. El aprovechamiento de los materiales no-biodegradables, facilita que no se sigan produciendo más y que, por tanto, contribuyamos a la protección del medio ambiente.
A este tipo de desechos se le conoce como SCRAP (del inglés, chatarra) y durante muchos años fue un problema para el sector industrial, ya que deshacerse de ellos era todo un inconveniente.
Ahora que los desechos industriales tienen una segunda vida, reciclar se ha convertido en una nueva oportunidad de negocios para muchas empresas.
El Reciclaje, un negocio rentable para las fábricas
Existen normativas que lo regulan e información mucho más extensa sobre la gestión de residuos industriales, un tema fundamental que las grandes compañías reflejan en sus contenidos sobre responsabilidad social y procesos de elaboración.
Está bien visto reciclar, optimizar el uso de materiales que pueden reutilizarse, hacer un uso racional de las materias primas, reducir el uso de energía y no contaminar. Incluso, existe todo un mercado activo sobre la compra/venta de este tipo de maquinarias.
Lo normal es que las fábricas cuenten con sus propias máquinas para el reciclado, consiguiendo no sólo un ahorro extra en la producción sino, también, que los productos resultantes sean más eficientes.
El uso de termoplásticos en la industria
El plástico es uno de los materiales más utilizados en las fábricas y como consecuencia, el que más desechos produce.
Según ECOEMBES, en 2017 cada habitante depositó en el contenedor amarillo 13,96 kg de envases plásticos, latas y briks, casi un 6% más que en el año anterior. Un alivio si tenemos en cuenta que el plástico es el material que más contamina.
La búsqueda incansable de materiales similares que puedan sustituir a los scraps plásticos, ha hecho posible que surjan los llamados “termoplásticos”, muchos más fáciles de reciclar.
Los termoplásticos se han impuesto con fuerza en el sector por sus propiedades y composición, favoreciendo el reciclado industrial y que estemos más cerca de movernos en una economía circular.